Durante 2021, la pandemia desató la transformación del inmobiliario en Europa, que mantuvo el atractivo para los inversores, algo que parece que también sucederá en este 2022 con incrementos.

Un estudio, elaborado por PwC y el Urban Land Institute, concluyó, en 2021, que un 44% de personas esperaban que el retorno de sus inversiones se redujera, si bien un 69% esperaba que estos datos se mantuvieran o incluso crecieran. “Seguimos estando ante un mercado comprador y, prueba de ello, es que al 53% de los participantes en el informe les preocupa la falta de activos prime o de calidad en los que invertir, y que el 55% se declare comprador neto en el conjunto de 2021”.

La inversión inmobiliaria en Europa crecerá un 5% en 2022

Los augurios de 2021 se cumplieron y los agentes ven buenas previsiones también para este año. Así, la inversión inmobiliaria en Europa crecerá un 5% en 2022 y volverá a niveles previos a la pandemia, según un estudio de CBRE.

La consultora predice que el PIB de la zona Euro crecerá un 4,7% en 2022, impulsado sobre todo por el aumento del consumo privado tras un periodo de gasto restringido durante la pandemia. Se espera que la inflación, que subió al 3,4% en septiembre de 2021, se mantenga elevada en el primer semestre de 2022, antes de situarse en el entorno del 2% en la segunda mitad del año.

Cierta estabilidad

Desde FIABCI España reconocen que “a nivel internacional el mercado inmobiliario se está estabilizando y empieza a actuar en base a la experiencia obtenida en los últimos meses de pandemia, donde ya se aprecia un aumento de las operaciones”.

Ahora bien, hay hándicaps que los inversores no pueden controlar como, por ejemplo, los niveles de inflación o el incremento generalizado de los precios de las materias primas que “a diferencia de lo ocurrido en este último año, en 2022 repercutirá de forma directa en el precio final de los activos”. Algo que ya se está notando en el incremento de precios de las viviendas, especialmente de obra nueva.