Estos doce meses que ya acumulamos de restricciones en la vida habitual, viajes, reuniones con amigos y consumo sobre todo en ocio, está trayendo como consecuencia positiva (alguna tenía que haber) el aumento del ahorro de las familias que mantienen sus ingresos.
Estos ahorros inesperados están provocando que muchos particulares estudien vías de inversión o ahorro que anteriormente no barajaban. La situación actual otorga rentabilidades bajísimas en la renta fija como pueden ser los Bonos del estado y sin embargo, las inversiones en el inmobiliario siguen manteniendo cifras positivas, eso sí, con diferencias notables por zona geográfica y también por tipologías.
En esta línea n hace unas semanas se publicaba datos de la rentabilidad del alquiler de los diferentes activos inmobiliarios. En este momento, el activo más rentable sigue siendo las oficinas, sin embargo, es uno de los productos más complejos para la gestión de un particular sobre todo si hablamos de espacios especialmente creados a tal efecto: edificios de oficinas o bajos.
En el caso de las viviendas hay mucha variación geográfica pero hasta en la provincia que menos rentabilidad se registra se supera el 3,5%. Las mayores cifras superan el 8% de rentabilidad.
Las cifras aumentan considerablemente si se adquiere una vivienda para reformar o se le hacen mejoras sustanciales antes de alquilarla. Las reformas que suelen aumentar más la rentabilidad son: actualizar y mejorar cocina y baños, mejorar aislamientos y modernizar la distribución (espacios abiertos).
Los garajes, por su parte, no obtienen los porcentajes de rentabilidad más atractivos pero en algunas zonas con alta demanda son una opción estupenda para invertir una cantidad de dinero menor (en comparación de viviendas y locales) y asegurarse una rentabilidad mensual.
Si tienes la suerte de encontrarte en la situación de haber aumentado tus ahorros y quieres saber cómo se aplican estas cifras generales a nuestra zona, ven a vernos y te ayudaremos a decidir dónde invertir tus ahorros esta vez.