La digitalización es un proceso irreversible en todos los ámbitos: sociales, económicos, educativos, administrativos… 𝐘 𝐞𝐥 𝐬𝐞𝐜𝐭𝐨𝐫 𝐢𝐧𝐦𝐨𝐛𝐢𝐥𝐢𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐧𝐨 𝐢𝐛𝐚 𝐚 𝐪𝐮𝐞𝐝𝐚𝐫 𝐚𝐣𝐞𝐧𝐨 𝐚 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐩𝐫𝐨𝐜𝐞𝐬𝐨 𝐝𝐞 𝐭𝐫𝐚𝐧𝐬𝐟𝐨𝐫𝐦𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐭𝐞𝐜𝐧𝐨𝐥𝐨́𝐠𝐢𝐜𝐚 𝐢𝐦𝐩𝐚𝐫𝐚𝐛𝐥𝐞. No nos referimos solo a tener una página web como un escaparate más, quizás hoy en día el principal, de cada negocio o proyecto inmobiliario. Sino también a las muchas herramientas que están surgiendo con el objetivo de facilitar, tanto para el vendedor como para el comprador, la adquisición de una vivienda.

No se trata solo de solucionar el problema de la falta de tiempo del comprador para visitar las diferentes casas en las que pueda estar interesado. Con la actual situación de pandemia que vive el mundo, los distintos instrumentos digitales para comprar una casa evitan también encuentros o reuniones innecesarios.

U̲n̲a̲ p̲r̲i̲m̲e̲r̲a̲ v̲i̲s̲i̲t̲a̲ v̲i̲r̲t̲u̲a̲l̲

Recorrer un piso o una casa sin poner un pie en ella es posible no solo ya a través de galerías fotográficas muy completas y desde todos los ángulos, ni de vídeos que nos llevan a dar un paseo por todas las estancias del hogar en venta.

La innovación tecnológica ha ido un paso más allá y ahora existe, por ejemplo, un 𝐬𝐨𝐟𝐭𝐰𝐚𝐫𝐞 𝐢𝐧𝐦𝐨𝐛𝐢𝐥𝐢𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐫𝐞𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐯𝐢𝐫𝐭𝐮𝐚𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐩𝐨𝐬𝐢𝐛𝐢𝐥𝐢𝐭𝐚 𝐥𝐚 𝐯𝐢𝐬𝐢𝐭𝐚 𝐞𝐧 𝐭𝐫𝐞𝐬 𝐝𝐢𝐦𝐞𝐧𝐬𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐢𝐧𝐦𝐮𝐞𝐛𝐥𝐞𝐬. Con unas gafas de realidad virtual y con solo dirigir la mirada se pueden realizar recorridos de 360º, pasar de una estancia a otra de la casa, moverse por ella con total libertad y guardar las que nos interesan en «favoritos», para luego seguir con la siguiente propiedad.

Este tipo de tecnología permite, además, moverse por las zonas comunes e incluso por los entornos inmediatos de las viviendas en venta. Así, con estos tours virtuales tan reales, inmersivos e intuitivos, el comprador puede descartar los inmuebles que no le atraigan y ahorrarse la visita en persona, con todo lo que ello implica en tiempo y traslados.

C̲a̲l̲c̲u̲l̲a̲d̲o̲r̲ y̲ c̲o̲m̲p̲a̲r̲a̲d̲o̲r̲ d̲e̲ h̲i̲p̲o̲t̲e̲c̲a̲s̲

Otra herramienta muy útil a la hora de tomar la decisión de comprar un piso es el 𝐜𝐚𝐥𝐜𝐮𝐥𝐚𝐝𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐡𝐢𝐩𝐨𝐭𝐞𝐜𝐚𝐬. Un instrumento que suelen tener ya incorporado gran parte de los portales inmobiliarios que, según el precio, los ahorros que tengamos, el tipo de interés y los años que queramos extender el préstamo, nos da un cálculo aproximado de la cuota mensual que nos quedaría y del importe total que pagaríamos al terminar.
Se trata de unos datos fundamentales para saber si es una vivienda que está al alcance de nuestro bolsillo. Y para descartarla de antemano si vemos que excede nuestras posibilidades económicas. Otra vez, gracias a un instrumento virtual, nos ahorramos una visita que se podía eludir.

Si se da el caso de que el precio está dentro de nuestras previsiones de gasto, otra herramienta útil antes de empezar a recorrer bancos para solicitar el crédito es un 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐚𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐡𝐢𝐩𝐨𝐭𝐞𝐜𝐚𝐬. Los requisitos de estos comparadores virtuales suelen ser tener que rellenar diferentes campos con la información del valor del inmueble, los ahorros disponibles, el tipo de contrato laboral del comprador, el sueldo neto de mayor valía de los posibles titulares de la casa o si son tenedores de otros préstamos, entre otras cuestiones.

T̲a̲s̲a̲c̲i̲ó̲n̲ y̲ c̲a̲t̲a̲s̲t̲r̲o̲ o̲n̲l̲i̲n̲e̲

En el apartado de tasaciones, un paso ineludible para pedir un crédito para comprar una casa, casi todas las empresas que ofrecen este servicio tienen su oferta de 𝐭𝐚𝐬𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐨𝐧𝐥𝐢𝐧𝐞. Claro que para ello siempre nos piden dejar datos personales, como algún teléfono o correo electrónico donde enviar el presupuesto según las características de la vivienda que hayamos señalado.
Pero las 𝐰𝐞𝐛𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐢𝐩𝐚𝐥𝐞𝐬 𝐛𝐚𝐧𝐜𝐨𝐬 𝐞𝐬𝐩𝐚𝐧̃𝐨𝐥𝐞𝐬 𝐭𝐢𝐞𝐧𝐞𝐧 𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐡𝐞𝐫𝐫𝐚𝐦𝐢𝐞𝐧𝐭𝐚 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐢𝐦𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐲 𝐧𝐨𝐬 𝐛𝐫𝐢𝐧𝐝𝐚𝐧 𝐥𝐚 𝐭𝐚𝐬𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐦𝐞𝐝𝐢𝐨 𝐬𝐢𝐧 𝐩𝐞𝐝𝐢𝐫 𝐦𝐨́𝐯𝐢𝐥𝐞𝐬 𝐧𝐢 𝐞𝐦𝐚𝐢𝐥𝐬. Con solo introducir el domicilio de la casa o piso a vender o comprar, nos informa de los metros construidos, el año de construcción y el valor medio de mercado, tanto de compra como de alquiler.

Por último, para conocer el valor catastral de una vivienda que, como sabemos, sirve de límite a la hora de negociar su precio (no se puede vender por debajo de su valor catastral porque, si lo hacemos, la Agencia Tributaria se cobrará la diferencia a la hora de pagar el impuesto de compra), el Ministerio de Hacienda tiene su Sede Electrónica del Catastro, desde la que los titulares del inmueble pueden solicitar el certificado.